[A horas de rendir. O no...]

Teorías de la Emociones

Teoría de James-Lange. Propuesta en 1884 proponía que experimentamos emociones como respuesta a los cambios fisiológicos de nuestro cuerpo. Por ejemplo, nos sentimos tristes porque lloramos, más que lloramos porque estamos tristes. Nuestros sistemas sensoriales mandan informacion a nuestro cerebro sobre nuestra situacion actual y, como consecuencia, nuestro cerebro manda señales a todo el cuerpo, modificando el tono muscular, la frecuencia cardíaca, etc. Después los sistemas sensoriales reaccionan ante los cambios evocados por el cerebro y lo que constituye la emoción es esta sensación. De acuerdo con James-Lange, los cambios fisiológicos son la emoción y, si se eliminan, la emocion se desvanece con ellos.[...]Antes que el lector rechace esta teoría como ridícula, puede intentar uno de los experimentos mentales sugeridos por James. Suponga que monta en cólera por algo que le acaba de ocurrir. Trate de suprimir todos los cambios fisiológicos asociados con la emoción. Los fuertes latidos de su corazón se calman, sus músculos tensos se relajan y la piel rubicunda de su cara comienza a recobrar un tono normal. Es difícil imaginar que se pueda mantener un estado de enojo en ausencia de cualquier signo fisiológico. En realidad, este pequeño experimento no es en absoluto diferente de la técnica utilizada en las clases de meditación para aliviar el estrés.

Bear M F, Connors B W, Paradiso M A. Neurociencia. Explorando el Cerebro. Masson. Williams & Wilkins. Barcelona, 1998. Cap. 16.